Pues también muchas gracias por la distinción. Con mi “habitual brevedad” me voy a permitir unas palabras. Ejem:
- En primer lugar, me gustaría compartir esta medalla con todos los trabajadores de limpieza urbana y residuos sólidos urbanos de todos los municipios de España. Ellas y ellos si que limpian, fijan y dan esplendor.
- En segundo lugar quisiera dedicarle la medalla a mi madre (y a muchas como ella, con espíritu de limpieza, orden y cuidado casero) que ya desde pequeño supo introducirme en esto del reciclado. La temida frase “si ese juguete está roto o ya no sirve es para tirar, es una pena” consiguió que me replanteara nuevos arreglos y usos de las cosas y sus piezas, si quería salvar el objeto de la pira. Por eso y...por todo lo demás, gracias mamá.
- Y, por último, me gustaría agradecer públicamente a mi amiga Marisa que (en otros tiempos, unos 20 años, con menos posibilidades económicas) me rebautizase con el apodo de “basurillas” al comprobar (en contra de opiniones de otros amigos que eran ingenieros y técnicos) que me había construido, totalmente funcional, para mi futura maqueta de tren, una plataforma giratoria de locomotoras de vapor; utilizando fundamentalmente entre otras lindezas una tapa redonda de un bidón de detergente para lavadora, el motor eléctrico de un Walkman que me encontré roto una noche, unos trozos de cartón, una radiografía recortada, unas piezas de mecano de hace unos 40 años, y unas viejas escobillas de un coche de excalectric. Aún la uso.
Luego vino la exposición de naves espaciales a escala construidas con envases reutilizados. Pero eso ya es otra historia.....
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